Cuidar es tener intimidad con aquello que se cuida, acogerlo, respetarlo, estar en sintonía, sentirlo dentro. Es dejar de ver como objetos la naturaleza y todo lo que existe en ella y en su lugar, percibirlos en su valor intrínseco. Progresivamente la relación ya no es de sujeto-objeto, sino de sujeto-sujeto. No es de dominio sino de con-vivencia. Y poco a poco, en lugar de agresividad, hay compañía afectuosa, en vez de dominación, interacción, comunión y convivencia amorosa” (Boff, 2002).
Concretamos la TERNURA en unas prácticas de cuidado interior, pero no solo se materializa en unos masajes “sencillos y con encanto” sino que lo importante es el nervio que está dentro de estas prácticas. Es la TERNURA que proponemos para una sociedad más allá del aparentar, consumir o conseguir, para un proyecto de humanidad distinta, que en definitiva es el Evangelio.
La TERNURA no es secundaria y como “para unos pocos”, sino que es posible que entre a formar parte del recorrido vital de cualquier persona. Un ejemplo es el Programa Para Sentirte Cuidada, aplicamos gestos de calidez con MINDFULNESS, el resultado es TERNURA.
Estamos muy contentos de los resultados. Puedes encontrarlos en el Programa Para Sentirte Cuidada del Centro Social S. Antonio y de Cruz Roja.